Saludo de los Pastores

En qué creemos:

Creemos en un Dios manifestado en tres personas Padre, Hijo y Espíritu Santo, iguales en poder, deidad y eternidad. Compartiendo una misma substancia y esencia en su naturaleza. (Deuteronomio 6: 4; Mateo 28: 19; Marcos 1: 9 – 11; 2 Corintios 13:14)

Jesucristo

Creemos en nuestro Señor Jesucristo como la segunda persona de la Deidad, quien siendo Dios se hizo hombre habiéndose encarnado en María siendo virgen, para nacer a esta vida y ser quien por medio de su sacrificio había de redimir a la humanidad perdida por causa del pecado, constituyendo así como el único y suficiente Salvador de la humanidad, no existiendo en absoluto ningún otro medio por el cual el ser humano pueda alcanzar el perdón de sus pecados y la vida eterna como regalo de la salvación por la gracia de Dios (Juan 1: 1 y 14; Hechos 4: 12; Romanos 9: 5; Filipenses 2: 5 – 6; Tito 2: 13)

Espíritu Santo

Es la tercera persona de la Bendita Trinidad, no siendo por ello menor al Padre y al Hijo en poder, gloria y eternidad, enviado para glorificar al Hijo

Es quien conduce al ser humano hasta Cristo para encontrar en él la salvación. También es quien habita en el corazón del creyente para capacitar a este para vivir de acuerdo a los mandamientos de Dios, apartado para una vida de santidad por medio de la obediencia. También es quien imparte los dones para que el creyente ofrezca un servicio de amor a Dios para la edificación del Cuerpo de Cristo (Juan 14: 16 – 17, 26; Juan 15: 26 – 27; Juan 16: 7- 15; Hechos 5: 3 – 4)

El Ser Humano

El hombre fue creado a imagen de Dios en un estado de inocencia otorgándosele toda capacidad para hacer el bien desde el momento mismo de su creación. En su estado de prueba el hombre falla desobedeciendo al mandamiento de Dios recibiendo como consecuencia de su acción la muerte espiritual como también muerte física, introduciendo de esa manera el pecado contaminando la creación trayendo consigo todos los males como enfermedades, homicidios, mentiras, idolatría, orgullo, etc.

Dios en su inmensa bondad provee al ser humano eterna salvación por medio de su Hijo Jesucristo para perdonar sus pecados al cual el hombre puede acceder por medio de la fe en la obra redentora de la cruz. (Génesis 1: 26 – 28; Génesis 3: 6; Génesis 6: 5; Romanos 3: 9 – 20)

La Salvación

Sostenemos la imposibilidad del ser humano de lograr la salvación por su propios méritos, por lo tanto estando en una condición de eterna condenación, Dios elaboro un plan de salvación por medio de su Hijo Jesucristo quien siendo Dios toma forma de hombre para anunciar el evangelio del reino y posteriormente ofrecer su vida en sacrificio por los pecados de la humanidad.

Los alcances de la obra redentora de nuestro Señor son universales haciéndose efectivos en todo aquel que expresa fe en la persona de nuestro Señor Jesucristo y su obra salvífica en la cruz, pudiendo el hombre también ejerciendo su libre albedrío rechazar el ofrecimiento de la salvación, permaneciendo asi en su condición de condenación eterna (Juan 3: 16 – 19: Hechos 4: 12; Romanos 3: 23; Romanos 6: 23: 2 Corintios 5: 19, 21; Efesios 2: 8)

La Biblia

Creemos que la Biblia en su totalidad es la Palabra de Dios revelada a los hombres para iluminar sus corazones y conducirlo a la fuente de salvación que es la cruz de Cristo

Sostenemos que los santos hombres de Dios que en la antigüedad redactaron los textos de la Biblia lo hicieron bajo la inspiración del Espíritu Santo, quien los capacitó para una redacción libre de error en todos los escritos originales (Éxodo 32: 16; Mateo 4: 4, 7, 10: 2 Timoteo 3: 15 – 17; 2 Pedro 1: 21)

La Iglesia

Entendemos por iglesia la comunidad de creyentes que habiendo experimentado el nuevo nacimiento son incorporados al cuerpo por medio del Espíritu Santo. La iglesia tiene dos expresiones las cuales son la Iglesia Universal que comprende a todos los creyentes en todas las épocas y lugares geográficos, como también encontramos al Iglesia Local que comprende un grupo de creyentes que se reúnen en un lugar particular para expresar allí su adoración, servicio a Dios y la evangelización a los inconversos. (Mateo 16: 18; 1 Corintios 12: 12 – 26; Efesios 1: 22 – 23; Efesios 5: 23; Colosenses 1: 18; 1 Timoteo 3: 15)


Misión: La iglesia de Cristo a Las Naciones existe con la finalidad de la predicación del evangelio a toda persona del Valle del Aconcagua para su conversión y desarrollo del carácter de Cristo en ellos, influyendo en su entorno familiar y amistades, preparándoles para la eternidad

Visión: Fuimos comisionados por nuestro Señor a la evangelización y hacer discípulos de quienes se conviertan a él esto por medio del esfuerzo evangelizador a través de las Casas Iglesias fortaleciendo la comunión y la edificación de los creyentes por medio de la instrucción de la Palabra de Dios a través de cultos, talleres, programas de discipulados y uso de redes sociales



Nuestros Valores

- Comunión

Creemos que el ser humano fue creado para tener comunión con Dios por medio de la fe en nuestro Señor Jesucristo al reconocerle como su único Señor y Salvador.

También creemos en la necesidad de comunión y compañerismo entre los creyentes como sello característico de la expresión de la Iglesia como cuerpo de Cristo en la participación activa en nuestras reuniones de celebración, estudios bíblicos y casas iglesias

- Adoración

Cada creyente debe constituirse como un adorador por excelencia, alguien que expresa su gratitud a Dios por medio del canto y la acción de gracias. Esta expresión es una experiencia personal como colectiva, no perdiendo su intimidad con Dios

- Oración

Cada creyente es llamado a una vida de intimidad por medio de la práctica constante de la oración personal como corporativa

En la práctica de la oración se presenta a si mismo ante Dios como también en la intercesión ante Dios por las necesidades del prójimo

- Predicación

Declaramos que cada creyente nacido de nuevo es hecho responsable en la predicación del Evangelio a toda persona como respuesta al mandato de la Gran Comisión de parte de nuestro Señor Jesucristo a todos sus discípulos

- Servicio

Creemos en la importancia del servicio de cada creyente quienes ha sido capacitados por medio del Espíritu Santo con dones particulares los cuales definen el área principal de servicio permanente en el Cuerpo de Cristo